Nuevo ágora
Compartir con mis alumnos documentos para analizar, ideas e inquietudes que les puedan servir para ampliar su reflexión sobre temas filosóficos y sociales.
lunes, 14 de mayo de 2012
La cigüeña llega por correo Arzobispo de La Plata advierte sobre banco de semen
LA PLATA, Domingo 13 mayo 2012 (ZENIT.org).- El programa “Claves para un Mundo Mejor”, transmitido por América TV, tuvo como invitado días atrás a monseñor Héctor Aguer, arzobispo de La Plata, quien comentó una noticia que ha dado cuenta de la existencia de “un banco de semen que según parece es el más grande del mundo y se llama “Cryos International”.
Según informa el sitio areopago.org.ar, el nombre es sintomático porque “cryos” en griego significa frío, helado; se alude posiblemente al frío necesario para la conservación del material biológico. La filial danesa de la empresa ofrece por Internet la venta de semen humano, bien cualificado. Así que ahora la “cigüeña puede llegar por correo”.
Comenzó explicando que “en los últimos años se han difundido, en todo el mundo, las técnicas de fecundación asistida. Habría que llamarlas mejor de procreación artificial” y por eso en “algunos países han puesto ciertos límites al avance de estas técnicas, por ejemplo, prohibiendo la fecundación con elementos biológicos de donantes ajenos a la pareja que quiere tener un hijo”.
Refiriéndose a la oferta de la empresa danesa señaló que “consiste en que cualquier persona, por ejemplo, una mujer soltera, o unida en pareja, que quiere tener un hijo, puede encargarlo a través de su computadora, selecciona el tipo que quiere y lo paga también allí. Lo recibe en su casa y se lo aplica, caseramente. Se puede elegir el color del pelo, el color de ojos, el índice de inteligencia y otras características. Las estadísticas señalan que no son muy requeridos los pelirrojos”.
“Hay precios bastante acomodados. Si el donante es anónimo, si la persona que compra no sabe de quien se trata ni que características tenga, cuesta entre 40 y 140 euros la dosis, que es ínfima, Creo que son 0,5 mililitros o algo así. Ahora, si es alguien conocido cuesta entre 120 y 320 euros. Conocido quiere decir que hay una base de datos de tal manera que accediendo a ella se puede oír la voz del tipo, ver fotos de cuando era niño, conocer algunas otras características como, por ejemplo, su coeficiente intelectual. De modo que se puede elegir el futuro bebé de acuerdo a una planilla”, agregó el prelado platense.
Luego comentó que, en un reportaje que acompaña al informe, se da cuenta que “uno de los donantes fue advertido por la empresa, la filial danesa de la “Cryos International”, de que tarde o temprano algún niño concebido con su semen iba a querer conocerlo. El muy fresco dijo que no tenía ninguna dificultad en encontrarse con él, porque después de todo se trata de una cuestión puramente genética. A ese nivel se ha degradado la paternidad humana y el misterio de la transmisión de la vida”.
Mons. Héctor Aguer añadió que la “Cryos International” proyecta “fletar un «barco de fecundación» para instalarse en aguas internacionales, junto al límite de aquellos países en los cuales no está permitida esta procreación artificial, para ofrecer ese servicio aguas adentro” y añadió que “este tema, como ustedes ven, no merece mayores comentarios. “Ex evidencia patet”, decían los escolásticos. La evidencia es clarísima aquí con sólo exponer de qué se trata”.
“Yo haría una simple reflexión: cuando el hombre, con su conducta, viola la frontera del orden natural, cualquier cosa es posible. Puede aventurarse hasta las fantasías más alocadas en el proceso de una vertiginosa deshumanización”, culminó.
http://www.zenit.org/article-42197?l=spanish
jueves, 26 de abril de 2012
El embrión: uno de nosotros Desde siempre los cristianos salvaron a los niños
Por Maurizio Moscone
ROMA, Domingo 8 abril 2012 (ZENIT.org).- “Se han destruido 94 embriones, 130 ovocitos y 5 muestras de líquido seminal (debido) a una elevación de la temperatura, con nivel cero de nitrógeno y el vaciamiento del tanque”. Estas fueron las declaraciones del Centro de Procreación Asistida para explicar lo que sucedió a inicios de abril en el hospital San Filippo Neri de Roma.
Los matutinos subrayaron que el accidente ha perjudicado a las parejas a las cuales estaban destinadas los embriones. A ellas, la fundación Atinori les prometió la procreación asistida gratis.
Todos se han preocupado de los futuros padres adoptivos, pero ¿quién se ha preocupado de los hijos? Alguien podrá interrogarse: ¿Por qué llamarlos hijos?, si como afirma Singer en Ética Práctica: “Los fetos, los niños recién nacidos y los descapacitados son no-personas, menos concientes y racionales de ciertos animales no humanos. Es legítimo matarlos”.
Singer es uno de los filósofos sobre bioética más famosos del mundo y no es el único que sostiene estas tesis. Por ejemplo, Engelhardt afirma en The foundations of Bioethics: “No todos los seres humanos son personas. Los fetos, los infantes, los retadados mentales graves y los que están en coma sin esperanza constituyen ejemplos de no-personas”.
Parfit por su parte, sostiene que “los niños pequeños y los viejos con grave déficit mental no son personas (...) y no lo son ni siquiera quienes temporáneamente están privados de la conciencia”.
Estos autoproclamados filósofos han obtenido una gran cantidad de seguidores no solamente entre los intelectuales sino también entre los políticos. Singer por ejemplo fue consejero del ex presidente español Rodríguez Zapatero, cuyo gobierno presentó un proyecto de ley inspirado en dicho pensamiento, según el cual los derechos de las personas se amplía hasta los monos.
El proyecto no fue aprobado debido a que cayó dicho gobierno. Pero para este especialista de bioética, los fetos, los recién nacidos y los discapacitados son no-personas, mientras que los monos antropormofos son personas.
Singer lo afirmó en 1994 en una entrevista al diario italiano L’Unitá: “Chimpancé, gorilas y orangutanes tienen una compleja y rica vida emocional; desarrollan relaciones interpersonales cercanas y duraderas; tienen una memoria de largo período y tienen autoconciencia; pueden resolver problemas muy complejos, que claramente piden reflexión; y pueden sufrir sea físicamente que psicológicamente. En una palabra son personas (sic)”.
Según el ‘filósofo’, los monos antropomorfos son personas porque son individuos conscientes, mientras los fetos, los recién nacidos y los discapacitados son no-personas, en tanto individuos privados de conciencia.
Lo que discrimina una persona de la no-persona según este pensamiento es la conciencia: si un animal o un ser humano está privado de la conciencia es una no-persona, si en cambio está conciente es una persona.
Spaemann sostiene, en Personas, sobre la diferencia entre “algo” y “alguien”, y que este modo de pensar encuentra sus orígenes en la filosofía moderna, en particular en el pensamiento de Descartes que identificaba la persona con la actividad pensante y por lo tanto con la conciencia. De hecho el filósofo se pregunta en las Meditaciones metafísicas: “¿Qué cosa soy por lo tanto yo?” y responde “una cosa que piensa”.
Posiciones análogas las encontramos en Locke, según el cual “sin conciencia no hay persona” (Ensayo sobre el intelecto humano), en donde distingue la idea de hombre de la idea de persona, la cual implica autoconciencia. Análogamente Kant, en Metafísica de las costumbres, distingue entre el ser humano como animal racional, instintivo y pasional (homo phaenomenon) y el ser humano como persona espiritual y moral (homo noumenon).
Y para concluir citamos a Hegel en la Fenomenología del espíritu, que identifica la existencia de las personas con la aparición de la conciencia individual.
La filosofía moderna seguramente ha alimentado el modo de pensar de los actuales bioéticos, quienes consideran los fetos humanos como cosas y no como personas, sin argumentar sus tesis, a diferencia de como lo hacían los filósofos antes mencionados.
Lo que une su pensamiento es una ideología neopagana, nostálgica del mundo pre-cristiano.
De hecho, escribe Singer en Ética Práctica, “Si volvemos a los orígenes de la civilización occidental, a los tiempos de los griegos o de los romanos, encontramos (…) que el pertenecer a la especie homo sapiens no era suficiente para garantizar la protección de la propia vida”.
El filósofo Rorty afirma, en Objectivity, Relativism and Truth: “Si se mira a un niño como a un ser humano, a pesar de la falta de relaciones sociales y culturales elementales, esto se debe solamente a la influencia de la tradición hebraico-cristiana y a su específica concepción de persona humana”.
Es verdad, fue el cristianismo el que afirmó la dignidad de la persona humana, desde la concepción hasta la muerte natural.
De hecho se lee en la Carta a Diogneto (siglo II), que los cristianos “se casan como todos, generan hijos, pero no arrojan a los recién nacidos” porque “es ya un hombre aquel que lo será”, sentenciaba Tertuliano.
Traducido del italiano por H. Sergio Mora
Obispo Reig Pla: "No quiero ofender a nadie, pero no renuncio a anunciar la verdad en la caridad"
Tras la polémica por su homilía del Viernes Santo en que habló de la homosexualidad
MADRID, martes 16 abril 2012 (ZENIT.org).- Monseñor Juan Antonio Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares, España, pronunció una homilía, en la misa retransmitida por Televisión Española el pasado Viernes Santo, que ha suscitado polémica, en incluso una querella, por sus palabras sobre los homosexuales. El obispo ha realizado unas declaraciones explicando su actitud.
En una entrevista concedida a “Religión en Libertad”, el prelado, presidente de la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal Española, habla por primera vez tras la polémica desatada por su homilía, y explica lo que dijo y lo que pretendió decir.
En su homilía, el obispo afirmaba “Quisiera decir una palabra a aquellas personas que, llevadas por tantas ideologías, acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana, piensan ya desde niño que tienen atracción hacia las personas de su mismo sexo y, a veces, para comprobarlo, se corrompen y se prostituyen, o van a clubs de hombres. Os aseguro que encuentran el infierno”.
El obispo explica sus palabras: “La sexualidad humana posee un sentido y significado inherente que la persona debe aprender a reconocer y descubrir respetando su lógica interna, la llamada 'antropología adecuada'. Sin embargo, las ideologías a las que me refería son la llamada 'ideología de género' y sus sucesivas mutaciones”.
“Muy brevemente indicaré –añade el obispo- que el principal postulado de la ideología de género es negar la diferencia sexual entre varón y mujer y afirmar que la configuración de la identidad sexual masculina y femenina es un producto de la cultura, una decisión personal construida en función de los deseos y apetencias subjetivas. Realmente, lo que se pretende es 'deconstruir' la antropología humana propuesta por la naturaleza de la persona y el pensamiento coherente con la misma. Todo lo demás quedaría justificado por el principio de no discriminación y tolerancia”.
Según monseñor Reig Pla, “la ideología de género se está quedando obsoleta ante otras propuestas más radicales de 'deconstrucción de la identidad', como son la teoría queer, el transhumanismo, posthumanismo y la teoría cyborg. Naturalmente, estas teorías que desconocen la naturaleza humana, no orientan bien el verdadero sentido y significado de la sexualidad, propiciando, más bien, la confusión del corazón humano”.
Explica el obispo que “la persona humana es una unidad substancial cuerpo-espíritu y la sexualidad es una dimensión esencial de la persona. El cuerpo no es una prótesis del 'yo' sino una visibilización de la persona. El cuerpo modalizado como varón o como mujer es una expresión del ser personal. Su configuración 'esponsal' es una llamada al amor y a la complementariedad sexual. Si confundimos el 'ser sexuado' con el 'deseo de elegir el modo de ser sexuado', estamos equivocando el mensaje”.
En opinión de monseñor Reig Pla, “nos encontramos ante un programa de 'deconstrucción' calculado y propiciado en todos los ámbitos (en la educación desde la más tierna infancia, en ciertos medios de comunicación, en el trabajo y en el ocio, etc.), que además cuenta con el impulso y protección de una gran cantidad de leyes inicuas y algunos poderosos lobbys que determinan qué es lo políticamente correcto y, por lo tanto, lo socialmente aceptable”.
“Desde estos presupuestos --añade--, a muchos niños, jóvenes y adultos –cada vez más– se les invita a poner en cuestión su identidad sexual, y con el tiempo se les exhorta a 'verificar y comprobar' cuáles son sus 'preferencias sexuales'; algunos caen en la trampa".
A la pregunta de si dijo algo que vaya en contra de lo que dice el Magisterio de la Iglesia Católica, monseñor Reig Pla responde: “Humildemente he de decir que todo lo que expliqué en mi homilía responde al Magisterio de la Iglesia Católica. Quise poner ejemplos actuales, que todo el mundo conoce, con la máxima delicadeza y caridad posible, pero con claridad".
Recordó que al respecto el Catecismo de la Iglesia Católica enseña que las personas con atracción sexual hacia el mismo sexo "deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta".
En relación a los actos sexuales entre personas del mismo sexo la Iglesia afirma que “son intrínsecamente desordenados. Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso” (Catecismo de la Iglesia Católica n. 2357).
Pero entonces, ¿hay esperanza para quienes sienten atracción sexual por el mismo sexo? “Por supuesto que sí –responde monseñor Reig Pla--. El corazón de cada hombre y mujer desea encontrar la verdad sobre el amor humano. 'En esperanza fuimos salvados, dice san Pablo a los Romanos y también a nosotros'. Según la fe cristiana, la 'redención', la salvación, no es simplemente un dato de hecho. Se nos ofrece la salvación en el sentido de que se nos ha dado la esperanza, una esperanza fiable, gracias a la cual podemos afrontar nuestro presente".
El obispo dice conocer experiencias, especialmente en España, Europa, Estados Unidos y Latinoamérica "muy esperanzadoras". "Con la pertinente unión de la ayuda espiritual y profesional, muchas personas, laicos, religiosos y sacerdotes, que voluntariamente lo han solicitado, se están viendo beneficiados por estos nuevos 'itinerarios de libertad, caridad, verdad y esperanza' que conducen al dominio de sí y, en su caso, al cambio".
Los que deseen conocer algunos de estos “itinerarios de la esperanza” pueden consultar la siguiente página web: www.unav.es/departamento/preventiva/homosexualidad.
¿Proponer un itinerario hacia el gobierno de la propia persona y, en su caso, la reorientación de la inclinación sexual, puede ofender a las personas con sentimientos homosexuales? "No --responde monseñor Reig Pla--, porque nosotros sólo proponemos; sin embargo, es cierto que los lobbys parecen usar la estrategia mediática de hacerse los ofendidos si se citan en voz alta algunos textos de la Biblia o del Magisterio de la Iglesia sobre este tema. Si alguien piensa que tiene un problema y pide ayuda, sin duda la Iglesia lo atenderá. No se trata de imponer nada a nadie, sólo ofrecemos el espacio de libertad, verdad y esperanza que otorga la Iglesia para quien libremente desee escapar de la dictadura del silencio".
Para quienes deseen ampliar conocimientos sobre este tema, han preparado en la página web de la diócesis una sección titulada “Homosexualidad y esperanza”, con información sobre documentos de la Iglesia, recursos, profesionales especialistas que abordan el tema, etc.: www.obispadoalcala.org/homosexualidad.html.
Sobre si se ha sentido solo ante este acoso mediático, el obispo responde: "Cuando se cree en Jesucristo y en la maternidad de la Iglesia uno no está nunca solo. He recibido el apoyo de obispos, sacerdotes, religiosos y fieles laicos de España y de muchas partes del mundo, así como de importantísimas instituciones eclesiales y civiles. He recibido más de un millar de correos electrónicos, cartas, faxes, telegramas y llamadas telefónicas de personas que han querido mostrarme su cercanía espiritual afirmando su adhesión al Magisterio de la Iglesia y asegurándome sus oraciones por mi persona y ministerio".
Desde algunos ámbitos le han acusado de “homofobia”. Sobre esto monseñor Reig Pla afirma: "La precisión terminológica es aquí muy importante. El diccionario de la Real Academia Española de la Lengua define la homofobia como 'aversión obsesiva hacia las personas homosexuales': nada más lejos del Magisterio de la Iglesia y de mi voluntad. Como ya he recordado la Iglesia enseña que las personas con AMS deben ser acogidas 'con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta'.
"En mi homilía --precisa el prelado--, poniendo ejemplos de pecados concretos, hablé de las infidelidades conyugales, del aborto procurado, de los empresarios y trabajadores que cometen injusticias, de los sacerdotes que se corrompen, de los jóvenes que consumen drogas y de las personas con AMS que, a veces, se corrompen y se prostituyen, o van a clubs de hombres. Deducir de ello que incitaba al odio hacia los matrimonios, las mujeres y los médicos, los sacerdotes, los empresarios y los trabajadores, los jóvenes y las personas con AMS es simplemente, por ser parco, una colosal manipulación; al contrario, anuncié que hay esperanza, que Dios nos ama a todos, que Cristo ha muerto por nuestros pecados llamándonos a conversión, y que nadie queda fuera de su Divina Misericordia".
Y concluye expresando un deseo: "En España, es muy importante mantener abierto un serio debate sobre estos temas, aportando los argumentos de la teología, de la antropología cristiana y de todas las ciencias humanas que faciliten más y mejor la propuesta del Magisterio de la Iglesia. El corazón humano es nuestro principal aliado y ese corazón espera el anuncio de la verdad y de la esperanza".
miércoles, 25 de enero de 2012
En el embarazo, la madre «hereda» algunas características del hijo Sorprendente hallazgo que se presenta en el Congreso
MILAN, 5 septiembre (ZENIT.org).- Una madre experimenta modificaciones durante el embarazo de modo permanente por la presencia del hijo, del que «hereda», en cierto modo, algunas características y, a través del hijo, también del padre del niño. Son algunos de los sorprendentes descubrimientos que serán presentados en el Congreso «En los albores de la vida humana», organizado por el Instituto de Ginecología y Obstetricia de la Universidad Católica de Roma, dirigido por el profesor Salvatore Mancuso, y que comenzará mañana en el Vaticano en el marco del Jubileo de los profesores universitarios.
Que el hijo herede el 50% de su patrimonio genético de la madre, y que en su vida uterina «oiga» el mundo exterior a través del cuerpo materno --que condiciona de modo sustancial la vida del feto-- eran datos ya conocidos. Sorprende, en cambio, saber que también la madre sufre algunas modificaciones a largo plazo a causa del embarazo justamente de la «persona» del hijo e, indirectamente, también del marido.
«Tenemos las pruebas --explica el profesor Mancuso-- de que, desde la quinta semana de gestación, es decir, cuando la mujer se da cuenta de que está embarazada, pasan del embrión a la madre una infinidad de mensajes, a través de sustancias químicas como hormonas, neurotransmisores, etc. Tales informaciones sirven para adaptar el organismo de la madre a la presencia del nuevo ser. Además se ha descubierto que el embrión manda también células estaminales que, gracias a la tolerancia inmunitaria de la madre hacia los hijos, colonizan la médula materna, de la que ya no se separan. Es más, de aquí nacen linfocitos para todo el resto de la vida de la mujer».
--Usted habla de quinta semana ¿Y antes?
--Desde la quinta semana hay seguramente un paso de células, pero desde la concepción salen mensajes. Incluso durante la primera fase de subdivisión celular, cuando el embrión transita a través de las trompas, se producen transmisiones por contacto con los tejidos en los que el embrión se mueve. Luego, tras la implantación en el útero, el diálogo se hace más intenso por vía sanguínea y celular y entran sustancias químicas en el torrente sanguíneo de la madre. Por último, las células estaminales del hijo pasan a la madre en gran cantidad, tanto en el momento del parto, espontáneo o cesáreo, como en caso de aborto, espontáneo o voluntario. Estas células se implantan en la médula de la madre y producen linfocitos, que tienen un origen común con las células del sistema nervioso central, tienen receptores para los neurotransmisores y pueden hacer pasar mensajes que el sistema nervioso materno capta. Se abre un territorio de investigación sorprendente: son informaciones de enorme importancia sobre las primeras fases de la vida.
--Por tanto, es difícil hacer rígidas divisiones de las fases de desarrollo del embrión.
--Cuando se hacen distinciones entre embrión y pre-embrión se comete un gran error. En una fase tan inicial, no se puede ciertamente hablar de sistema nervioso central, pero los mensajes que manda el embrión a la madre expresan manifestaciones propias de la especie humana. Y se usan instrumentos que son sustancias químicas muy especializadas y células como las estaminales. Hay que recordar que si faltase la comunicación, el organismo materno rechazaría al embrión. El diálogo permite la acogida perfecta de un organismo extraño al 50% del patrimonio genético de la madre. De hecho estas sustancias químicas que expresan las exigencias nutricionales y metabólicas del embrión a la madre provocan en ella una depresión inmunitaria que facilita la acogida del nuevo ser.
--¿Cuánto tiempo dura esta influencia del feto sobre la madre?
--Las células estaminales han sido encontradas en la madre incluso treinta años después del parto. Se puede decir por tanto que el embarazo no dura las 40 semanas canónicas sino toda la vida de la mujer. Y debe hacer reflexionar también acerca de las hipótesis de un útero «de alquiler»: en este caso, la madre que alberga al embrión acoge a un ser que tiene el patrimonio genético extraño al 100% y que la «modificará» para el resto de la vida. No tenemos idea de las consecuencias a distancia de tales operaciones. Y se presentan nuevos interrogantes también para las técnicas de fecundación artificial de tipo heterólogo.
--Sorprende también la idea de que algo del padre se transfiera a la madre.
--Son territorios todavía por explorar. Ciertamente se impone una reflexión sobre un nuevo modo de entender el embarazo. Se crea indudablemente un lazo estrecho también entre mujer y hombre, porque el hijo tiene en un 50% las características genéticas del padre. Y las células estaminales hematopoiéticas (que han sido encontradas incluso en el hígado de la madre como hepatocitos) van a la médula y producen células hijas, linfocitos y neurotransmisores con la capacidad de dialogar con el sistema nervioso central materno. Es un poco como si los «pensamientos» del hijo pasasen a la madre incluso muchos años después de su nacimiento.
http://www.zenit.org/article-535?l=spanish
Que el hijo herede el 50% de su patrimonio genético de la madre, y que en su vida uterina «oiga» el mundo exterior a través del cuerpo materno --que condiciona de modo sustancial la vida del feto-- eran datos ya conocidos. Sorprende, en cambio, saber que también la madre sufre algunas modificaciones a largo plazo a causa del embarazo justamente de la «persona» del hijo e, indirectamente, también del marido.
«Tenemos las pruebas --explica el profesor Mancuso-- de que, desde la quinta semana de gestación, es decir, cuando la mujer se da cuenta de que está embarazada, pasan del embrión a la madre una infinidad de mensajes, a través de sustancias químicas como hormonas, neurotransmisores, etc. Tales informaciones sirven para adaptar el organismo de la madre a la presencia del nuevo ser. Además se ha descubierto que el embrión manda también células estaminales que, gracias a la tolerancia inmunitaria de la madre hacia los hijos, colonizan la médula materna, de la que ya no se separan. Es más, de aquí nacen linfocitos para todo el resto de la vida de la mujer».
--Usted habla de quinta semana ¿Y antes?
--Desde la quinta semana hay seguramente un paso de células, pero desde la concepción salen mensajes. Incluso durante la primera fase de subdivisión celular, cuando el embrión transita a través de las trompas, se producen transmisiones por contacto con los tejidos en los que el embrión se mueve. Luego, tras la implantación en el útero, el diálogo se hace más intenso por vía sanguínea y celular y entran sustancias químicas en el torrente sanguíneo de la madre. Por último, las células estaminales del hijo pasan a la madre en gran cantidad, tanto en el momento del parto, espontáneo o cesáreo, como en caso de aborto, espontáneo o voluntario. Estas células se implantan en la médula de la madre y producen linfocitos, que tienen un origen común con las células del sistema nervioso central, tienen receptores para los neurotransmisores y pueden hacer pasar mensajes que el sistema nervioso materno capta. Se abre un territorio de investigación sorprendente: son informaciones de enorme importancia sobre las primeras fases de la vida.
--Por tanto, es difícil hacer rígidas divisiones de las fases de desarrollo del embrión.
--Cuando se hacen distinciones entre embrión y pre-embrión se comete un gran error. En una fase tan inicial, no se puede ciertamente hablar de sistema nervioso central, pero los mensajes que manda el embrión a la madre expresan manifestaciones propias de la especie humana. Y se usan instrumentos que son sustancias químicas muy especializadas y células como las estaminales. Hay que recordar que si faltase la comunicación, el organismo materno rechazaría al embrión. El diálogo permite la acogida perfecta de un organismo extraño al 50% del patrimonio genético de la madre. De hecho estas sustancias químicas que expresan las exigencias nutricionales y metabólicas del embrión a la madre provocan en ella una depresión inmunitaria que facilita la acogida del nuevo ser.
--¿Cuánto tiempo dura esta influencia del feto sobre la madre?
--Las células estaminales han sido encontradas en la madre incluso treinta años después del parto. Se puede decir por tanto que el embarazo no dura las 40 semanas canónicas sino toda la vida de la mujer. Y debe hacer reflexionar también acerca de las hipótesis de un útero «de alquiler»: en este caso, la madre que alberga al embrión acoge a un ser que tiene el patrimonio genético extraño al 100% y que la «modificará» para el resto de la vida. No tenemos idea de las consecuencias a distancia de tales operaciones. Y se presentan nuevos interrogantes también para las técnicas de fecundación artificial de tipo heterólogo.
--Sorprende también la idea de que algo del padre se transfiera a la madre.
--Son territorios todavía por explorar. Ciertamente se impone una reflexión sobre un nuevo modo de entender el embarazo. Se crea indudablemente un lazo estrecho también entre mujer y hombre, porque el hijo tiene en un 50% las características genéticas del padre. Y las células estaminales hematopoiéticas (que han sido encontradas incluso en el hígado de la madre como hepatocitos) van a la médula y producen células hijas, linfocitos y neurotransmisores con la capacidad de dialogar con el sistema nervioso central materno. Es un poco como si los «pensamientos» del hijo pasasen a la madre incluso muchos años después de su nacimiento.
http://www.zenit.org/article-535?l=spanish
Portugal estudia aprobar la maternidad subrogada Daniel Serrão, experto en bioética analiza las implicaciones de la medida
ROMA, miércoles 25 enero 2012 (ZENIT.org).- En un artículo publicado el pasado 22 de enero, el diario vaticano L'Osservatore Romano afronta la situación creada en Portugal por un proyecto de ley sobre reproducción asistida que incluye la aprobación de las madres de alquiler, o subrogadas.
El proyecto sobre reproducción asistida fue presentado en el parlamento portugués por varios partidos y contempla la posibilidad de admitir la maternidad de alquiler sólo en el caso de una familia en la que se de la imposibilidad de tener hijos por parte de la mujer, como por ejemplo en el caso de no tener útero.
Sin embargo, el proyecto no fue finalmente votado, por divisiones internas de los partidos que lo presentaban, y fue remitido de nuevo a la comisión pertinente para ser estudiado de nuevo.
Aún en este caso, el diario vaticano L'Osservatore Romano advierte de las consecuencias morales y éticas que implicaría la aprobación de la maternidad subrogada.
El diario cita al experto en bioética Daniel Serrão quien señala que la fecundación médicamente asistida transforma el significado mismo de la paternidad. En particular, la denominada “heteróloga” no ofrece la garantía al nascituro de haber sido deseado dentro de una relación interpersonal exclusiva y viola el derecho a conocer su identidad familiar. La paternidad es fragmentada en una multiplicidad de figuras: los padres biológicos (los llamados "donantes"), la madre gestante, los padres sociales. El Estado "sin duda no puede convertirse en cómplice de esta destrucción de las relaciones", afirma Serrão .
Daniel Serrão, profesor emérito de bioética de la Universidad Católica Portuguesa y miembro de la Pontificia Academia para la Vida, ha criticado sin ambages el nuevo proyecto de ley sobre reproducción asistida presentado en el parlamento de Portugal y en especial la regulación y legalización de la maternidad subrogada, por el que una mujer se presta a llevar el embarazo de un óvulo ya fecundado (in vitro), en lugar de otra mujer fisiológicamente incapaz de hacerlo.
El biólogo advierte sobre la complejidad del problema, desde el punto de vista ético, biológico, psicológico, jurídico y sociológico, para todos aquellos involucrados en la práctica asistencial, y señala que la redacción del texto legislativo debe ser "muy preciso y completo", en cuanto se deben, necesariamente, "armonizar y hacer compatibles los intereses de la mujer que se ofrece como "espacio" para llevar a término el embarazo, los intereses, o mejor dicho, el inviolable derecho del niño por nacer, y los intereses de la pareja que utiliza este procedimiento”. Y aún más, la nueva legislación no debe reducir o incluso suprimir, como un valor social importante, el vínculo entre la identidad social y la identidad biológica del niño por nacer, más allá de un modelo de pura eficiencia pragmática.
El experto en bioética destaca el valor de la tutela del concebido, las dudas y perplejidades, así como que la prohibición de la fecundación heteróloga se basa en la necesidad de tener en cuenta la “disociación de la maternidad y la paternidad, propia de la técnica". De hecho es violado, según el experto, el principio fundamental del derecho: "La certeza de la identidad de los padres".
De acuerdo con Daniel Serrão, inducir a una mujer a quedar embarazada a través del proceso de transferencia de un embrión formado en el laboratorio (fecundación extracorpórea), con el compromiso "contractual" de que el niño que nacerá será entregado a otra persona, a ''otra" madre, abre dos perspectivas. Por un lado el acto de amor y generosidad de una mujer que renuncia a un niño que ha desarrollado durante nueve meses y se lo entrega a los padres biológicos. Del otro lado, la manipulación de la maternidad de una mujer que, en su aspiración de tener un hijo, paga por este servicio. En ese sentido --señala el biólogo--, en algunos países se organiza y promueve una verdadera "industria para producir niños que luego son vendidos".
Haciendo referencia a estudios recientes, Serrão recuerda que la función del cerebro de la mujer "se altera durante el embarazo", lo que hace muy difícil la separación del niño recién nacido. Sin embargo, para estas madres alquiladas existen otros problemas y otros riesgos relacionados con el embarazo y el parto que "no se pueden omitir", ya que son obligación ética y deontología de información por parte del médico, entre ellos el aborto espontáneo, el riesgo para el embarazo si el feto tiene graves defectos congénitos, e incluso si el niño nace con defectos congénitos o adquiridos, la madre biológica puede negarse a aceptar al niño “encargado”. Pero también existe la posibilidad de que por generosidad y amor, o por un "automatismo" neurobiológico, la madre de alquiler decida, después del parto, no entregar el niño a la madre biológica. Este cambio de idea --se pregunta el experto--, ¿podría tener consecuencias legales? Pero el problema también se puede tergiversar y volverse inquietante: ¿si la mujer que ha buscado la ayuda de la maternidad subrogada decide cambiar de opinión, ¿qué pasaría con el feto? El biólogo portugués dibuja también otros escenarios: si la pareja de padres que buscaban la ayuda se divorcian durante el embarazo, ¿a quién irá el niño recién nacido?
Los problemas mencionados --concluye el profesor Daniel Serrão--, son un ejemplo sencillo, pero incompleto. La imagen que se proyecta en términos médico-legales, es compleja. El proyecto de ley sobre la procreación médicamente asistida no podrá eludir los fundamentales problemas éticos, antropológicos y sociológicos sobre el derecho y la protección de la vida desde la concepción hasta la muerte natural, la familia y la visión de la persona humana que debe ser reconocida como “alguien”, y no, por desgracia, como “algo”.
Los obispos del Portugal, en varias ocasiones, han subrayado que el proyecto de ley sobre la procreación médicamente asistida está registrando una insuficiente sensibilización pública, tratándose de un tema "de gran importancia, delicadeza y de enorme exigencia ética." Si bien reconocen la necesidad de una legislación sobre la materia, los obispos sienten "el deber de decir que el embrión debe ser respetado", asegurándole protección y dignidad, identidad e integridad.
http://www.zenit.org/article-41354?l=spanish
El proyecto sobre reproducción asistida fue presentado en el parlamento portugués por varios partidos y contempla la posibilidad de admitir la maternidad de alquiler sólo en el caso de una familia en la que se de la imposibilidad de tener hijos por parte de la mujer, como por ejemplo en el caso de no tener útero.
Sin embargo, el proyecto no fue finalmente votado, por divisiones internas de los partidos que lo presentaban, y fue remitido de nuevo a la comisión pertinente para ser estudiado de nuevo.
Aún en este caso, el diario vaticano L'Osservatore Romano advierte de las consecuencias morales y éticas que implicaría la aprobación de la maternidad subrogada.
El diario cita al experto en bioética Daniel Serrão quien señala que la fecundación médicamente asistida transforma el significado mismo de la paternidad. En particular, la denominada “heteróloga” no ofrece la garantía al nascituro de haber sido deseado dentro de una relación interpersonal exclusiva y viola el derecho a conocer su identidad familiar. La paternidad es fragmentada en una multiplicidad de figuras: los padres biológicos (los llamados "donantes"), la madre gestante, los padres sociales. El Estado "sin duda no puede convertirse en cómplice de esta destrucción de las relaciones", afirma Serrão .
Daniel Serrão, profesor emérito de bioética de la Universidad Católica Portuguesa y miembro de la Pontificia Academia para la Vida, ha criticado sin ambages el nuevo proyecto de ley sobre reproducción asistida presentado en el parlamento de Portugal y en especial la regulación y legalización de la maternidad subrogada, por el que una mujer se presta a llevar el embarazo de un óvulo ya fecundado (in vitro), en lugar de otra mujer fisiológicamente incapaz de hacerlo.
El biólogo advierte sobre la complejidad del problema, desde el punto de vista ético, biológico, psicológico, jurídico y sociológico, para todos aquellos involucrados en la práctica asistencial, y señala que la redacción del texto legislativo debe ser "muy preciso y completo", en cuanto se deben, necesariamente, "armonizar y hacer compatibles los intereses de la mujer que se ofrece como "espacio" para llevar a término el embarazo, los intereses, o mejor dicho, el inviolable derecho del niño por nacer, y los intereses de la pareja que utiliza este procedimiento”. Y aún más, la nueva legislación no debe reducir o incluso suprimir, como un valor social importante, el vínculo entre la identidad social y la identidad biológica del niño por nacer, más allá de un modelo de pura eficiencia pragmática.
El experto en bioética destaca el valor de la tutela del concebido, las dudas y perplejidades, así como que la prohibición de la fecundación heteróloga se basa en la necesidad de tener en cuenta la “disociación de la maternidad y la paternidad, propia de la técnica". De hecho es violado, según el experto, el principio fundamental del derecho: "La certeza de la identidad de los padres".
De acuerdo con Daniel Serrão, inducir a una mujer a quedar embarazada a través del proceso de transferencia de un embrión formado en el laboratorio (fecundación extracorpórea), con el compromiso "contractual" de que el niño que nacerá será entregado a otra persona, a ''otra" madre, abre dos perspectivas. Por un lado el acto de amor y generosidad de una mujer que renuncia a un niño que ha desarrollado durante nueve meses y se lo entrega a los padres biológicos. Del otro lado, la manipulación de la maternidad de una mujer que, en su aspiración de tener un hijo, paga por este servicio. En ese sentido --señala el biólogo--, en algunos países se organiza y promueve una verdadera "industria para producir niños que luego son vendidos".
Haciendo referencia a estudios recientes, Serrão recuerda que la función del cerebro de la mujer "se altera durante el embarazo", lo que hace muy difícil la separación del niño recién nacido. Sin embargo, para estas madres alquiladas existen otros problemas y otros riesgos relacionados con el embarazo y el parto que "no se pueden omitir", ya que son obligación ética y deontología de información por parte del médico, entre ellos el aborto espontáneo, el riesgo para el embarazo si el feto tiene graves defectos congénitos, e incluso si el niño nace con defectos congénitos o adquiridos, la madre biológica puede negarse a aceptar al niño “encargado”. Pero también existe la posibilidad de que por generosidad y amor, o por un "automatismo" neurobiológico, la madre de alquiler decida, después del parto, no entregar el niño a la madre biológica. Este cambio de idea --se pregunta el experto--, ¿podría tener consecuencias legales? Pero el problema también se puede tergiversar y volverse inquietante: ¿si la mujer que ha buscado la ayuda de la maternidad subrogada decide cambiar de opinión, ¿qué pasaría con el feto? El biólogo portugués dibuja también otros escenarios: si la pareja de padres que buscaban la ayuda se divorcian durante el embarazo, ¿a quién irá el niño recién nacido?
Los problemas mencionados --concluye el profesor Daniel Serrão--, son un ejemplo sencillo, pero incompleto. La imagen que se proyecta en términos médico-legales, es compleja. El proyecto de ley sobre la procreación médicamente asistida no podrá eludir los fundamentales problemas éticos, antropológicos y sociológicos sobre el derecho y la protección de la vida desde la concepción hasta la muerte natural, la familia y la visión de la persona humana que debe ser reconocida como “alguien”, y no, por desgracia, como “algo”.
Los obispos del Portugal, en varias ocasiones, han subrayado que el proyecto de ley sobre la procreación médicamente asistida está registrando una insuficiente sensibilización pública, tratándose de un tema "de gran importancia, delicadeza y de enorme exigencia ética." Si bien reconocen la necesidad de una legislación sobre la materia, los obispos sienten "el deber de decir que el embrión debe ser respetado", asegurándole protección y dignidad, identidad e integridad.
http://www.zenit.org/article-41354?l=spanish
martes, 24 de enero de 2012
Estados Unidos: La pena de muerte, en declive En 2011 las nuevas condenas a muerte se redujeron a un mínimo histórico
ROMA, martes 24 enero 2012 (ZENIT.org) - El año pasado, por primera vez desde 1976, cuando se reintrodujo la pena capital en Estados Unidos, el número anual de nuevas condenas a muerte fue inferior a cien. Lo revela el Death Penalty Information Center (Centro de Información sobre la Pena de Muerte), que publicó a fin de año su informe anual The Death Penalty in 2011: Year End Report (La Pena de Muerte en 2011: Informe Final Anual).En 2011, las nuevas condenas a muerte se redujeron a 78, una drástica caída respecto al año récord de 1996, cuando se emitieron 315 sentencias a la pena capital. El declive comenzó a finales de los años 90, cuando hubo un promedio de 300 sentencias por año. Desde entonces el número ha disminuido constantemente. También el número de ejecuciones se ha reducido a 43, es decir, tres menos que el año pasado.
Sólo 13 estados llevaron a cabo ejecuciones en 2011, de los cuales el 74% fueron en el Sur, refiere el informe. Y sólo 8 estados hicieron más de una ejecución. Como de costumbre, Texas es el estado con el mayor número de ejecuciones: 13. Como señala el informe, la cifra representa sin embargo, una reducción del 46% respecto a 2009, cuando se llevaron a cabo 24 ejecuciones, e incluso un descenso en comparación con 2010, que tuvo 17 ejecuciones.
Desde 1976, sobre el número total de 1.277 ejecuciones, 477 fueron ejecutadas en Texas, o sea el 37% del total. En 2011, sin embargo, hubo sólo ocho nuevas sentencias de muerte.
En enero de 2011, la asamblea legislativa de Illinois votó a favor de la derogación de la pena de muerte, sustituyéndola por la de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. El voto convirtió a Illinois en el cuarto estado en otros tantos años en abolir la pena capital.
Una de las razones que motivaron a Illinois fue el coste económico de la pena de muerte. Una comisión estatal puso de relieve que, en los últimos siete años, se habían gastado cien millones de dólares para ayudar a los condados con procesos judiciales por pena capital.
"La evidencia que me presentaron exfiscales y jueces, con décadas de experiencia en el sistema de justicia penal, me ha convencido de que es imposible concebir un sistema que sea coherente, que esté libre de discriminación basada en la raza, geografía o circunstancia económica, y que obtenga siempre justicia", dijo el gobernador Pat Quinn, al firmar la nueva ley.
En la actualidad, hay 34 Estados que mantienen la pena de muerte. Además, el gobernador de Oregon, John Kitzhaber, ha suspendido una ejecución inminente en noviembre pasado y ha declarado que no habrán más ejecuciones durante su mandato.
Siempre a nivel de los estados, el presidente de la Corte Suprema del estado de Ohio convocó a un comité de 21 personas para estudiar los problemas relacionados con la pena de muerte. También --revela el informe--, un juez de la Corte Suprema de Pennsylvania describió el trabajo apelatorio llevado a cabo en muchos de los casos capitales, como caracterizado por "el caos y la incongruencia" y exigió "una reforma inmediata."
Opinión
Continúa disminuyendo incluso el apoyo a la pena de muerte. Según el informe, la encuesta anual Gallup sobre la pena de muerte reveló que el año pasado sólo el 61% de los encuestados estaban a favor de la pena de muerte, el nivel más bajo en décadas.
El informe señala también que la aplicación de la pena de muerte sigue siendo muy arbitraria. En 1972, el Tribunal Supremo detuvo el recurso a la pena de muerte porque consideraba que venía siendo aplicada de una manera impredecible y arbitraria.
Tras los cambios introducidos en las leyes de algunos estados, la Corte Suprema readmitió el uso de la pena de muerte en 1976. Sin embargo, las sentencias capitales siguen siendo aplicadas de forma muy incoherente, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte.
Esta acusación se refuerza con una investigación reciente llevada a cabo por el profesor John Donohue, de la Stanford Law School, que analiza las sentencias de muerte de 1973 a 2007 en el estado de Connecticut. Según Donohue --como señala el resumen de los resultados de su investigación hecha pública el 12 de enero pasado, por el Centro de Información sobre la Pena de Muerte--, "el récord por parte del Estado de los casos elegibles para la pena de muerte evidencia una política caótica y malsana en el campo de la justicia penal, que no sirve ni a la disuasión ni a la retribución a la sociedad".
Donohue señaló que se puede definir el sistema de la pena capital en el estado como de "arbitraria y discriminatoria".
Según el estudio, no hay una diferencia significativa entre los asesinatos elegibles para la pena de muerte, en los que los fiscales buscan la pena de muerte, y aquellos que no lo son.
También los factores raciales influyen gravemente sobre la probabilidad de recibir una condena a muerte. Los acusados que pertenecen a una minoría racial que cometen asesinatos de víctimas blancas, elegibles para la pena de muerte, corren seis veces más el riesgo de recibir una sentencia de muerte, respecto a los imputados pertenecientes a minorías que cometen homicidios de víctimas pertenecientes a minorías, descubrió Donohue.
Todo indica que en 2012 continuará la tendencia de alejarse de la pena de muerte. El lunes 16 de enero, el Centro de Información sobre la Pena de Muerte informó que el Senado de Illinois aprobó recientemente una resolución para iniciar un estudio sobre la pena de muerte. El informe tocará temas como la justicia, la equidad y los costes de la pena capital.
Desde que en 1978 Pennsylvania reinstauró la pena de muerte, sólo tres personas fueron ejecutadas, pero hay más de doscientos presos condenados a muerte en los corredores de la muerte.
Por P. John Flynn LC
http://www.zenit.org/article-41349?l=spanish
Sólo 13 estados llevaron a cabo ejecuciones en 2011, de los cuales el 74% fueron en el Sur, refiere el informe. Y sólo 8 estados hicieron más de una ejecución. Como de costumbre, Texas es el estado con el mayor número de ejecuciones: 13. Como señala el informe, la cifra representa sin embargo, una reducción del 46% respecto a 2009, cuando se llevaron a cabo 24 ejecuciones, e incluso un descenso en comparación con 2010, que tuvo 17 ejecuciones.
Desde 1976, sobre el número total de 1.277 ejecuciones, 477 fueron ejecutadas en Texas, o sea el 37% del total. En 2011, sin embargo, hubo sólo ocho nuevas sentencias de muerte.
En enero de 2011, la asamblea legislativa de Illinois votó a favor de la derogación de la pena de muerte, sustituyéndola por la de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. El voto convirtió a Illinois en el cuarto estado en otros tantos años en abolir la pena capital.
Una de las razones que motivaron a Illinois fue el coste económico de la pena de muerte. Una comisión estatal puso de relieve que, en los últimos siete años, se habían gastado cien millones de dólares para ayudar a los condados con procesos judiciales por pena capital.
"La evidencia que me presentaron exfiscales y jueces, con décadas de experiencia en el sistema de justicia penal, me ha convencido de que es imposible concebir un sistema que sea coherente, que esté libre de discriminación basada en la raza, geografía o circunstancia económica, y que obtenga siempre justicia", dijo el gobernador Pat Quinn, al firmar la nueva ley.
En la actualidad, hay 34 Estados que mantienen la pena de muerte. Además, el gobernador de Oregon, John Kitzhaber, ha suspendido una ejecución inminente en noviembre pasado y ha declarado que no habrán más ejecuciones durante su mandato.
Siempre a nivel de los estados, el presidente de la Corte Suprema del estado de Ohio convocó a un comité de 21 personas para estudiar los problemas relacionados con la pena de muerte. También --revela el informe--, un juez de la Corte Suprema de Pennsylvania describió el trabajo apelatorio llevado a cabo en muchos de los casos capitales, como caracterizado por "el caos y la incongruencia" y exigió "una reforma inmediata."
Opinión
Continúa disminuyendo incluso el apoyo a la pena de muerte. Según el informe, la encuesta anual Gallup sobre la pena de muerte reveló que el año pasado sólo el 61% de los encuestados estaban a favor de la pena de muerte, el nivel más bajo en décadas.
El informe señala también que la aplicación de la pena de muerte sigue siendo muy arbitraria. En 1972, el Tribunal Supremo detuvo el recurso a la pena de muerte porque consideraba que venía siendo aplicada de una manera impredecible y arbitraria.
Tras los cambios introducidos en las leyes de algunos estados, la Corte Suprema readmitió el uso de la pena de muerte en 1976. Sin embargo, las sentencias capitales siguen siendo aplicadas de forma muy incoherente, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte.
Esta acusación se refuerza con una investigación reciente llevada a cabo por el profesor John Donohue, de la Stanford Law School, que analiza las sentencias de muerte de 1973 a 2007 en el estado de Connecticut. Según Donohue --como señala el resumen de los resultados de su investigación hecha pública el 12 de enero pasado, por el Centro de Información sobre la Pena de Muerte--, "el récord por parte del Estado de los casos elegibles para la pena de muerte evidencia una política caótica y malsana en el campo de la justicia penal, que no sirve ni a la disuasión ni a la retribución a la sociedad".
Donohue señaló que se puede definir el sistema de la pena capital en el estado como de "arbitraria y discriminatoria".
Según el estudio, no hay una diferencia significativa entre los asesinatos elegibles para la pena de muerte, en los que los fiscales buscan la pena de muerte, y aquellos que no lo son.
También los factores raciales influyen gravemente sobre la probabilidad de recibir una condena a muerte. Los acusados que pertenecen a una minoría racial que cometen asesinatos de víctimas blancas, elegibles para la pena de muerte, corren seis veces más el riesgo de recibir una sentencia de muerte, respecto a los imputados pertenecientes a minorías que cometen homicidios de víctimas pertenecientes a minorías, descubrió Donohue.
Todo indica que en 2012 continuará la tendencia de alejarse de la pena de muerte. El lunes 16 de enero, el Centro de Información sobre la Pena de Muerte informó que el Senado de Illinois aprobó recientemente una resolución para iniciar un estudio sobre la pena de muerte. El informe tocará temas como la justicia, la equidad y los costes de la pena capital.
Desde que en 1978 Pennsylvania reinstauró la pena de muerte, sólo tres personas fueron ejecutadas, pero hay más de doscientos presos condenados a muerte en los corredores de la muerte.
Por P. John Flynn LC
http://www.zenit.org/article-41349?l=spanish
martes, 10 de enero de 2012
Cuando el niño encargado no es el que se recibe O cómo las "garantías de devolución" están anulando la vocación a la paternidad
WASHINGTON, lunes 9 enero 2012 (ZENIT.org).- Ofrecemos a los lectores, por su interés, un artículo publicado en nuestra edición en inglés en el que se aborda el problema de los niños que no responden a los deseos de sus padres que los “encargaron” de determinada manera, o si lo hubieran sabido antes los hubieran abortado, y demandan a los médicos que no cumplieron sus deseos. El niño visto como un producto “defectuoso”, y no como una persona que responde a un proyecto divino, que va más allá del deseo de los padres.
Por Denise Hunnell, MD*
Imagínese mirando a su niño y declarando con frialdad: "Tú nunca debiste haber nacido". Los padres están haciendo exactamente eso en los tribunales de todo el mundo, ya que presentan demandas por una "vida indebida" o un "nacimiento indebido", en contra de médicos y clínicas de fertilidad.
Estos penosos casos son una variación de las clásicas demandas de "homicidio culposo" por negligencia médica. El hecho es que los demandantes no están satisfechos porque el paciente --en este caso un niño--, vivió en vez de morir. Por lo general, estos niños sufren de una discapacidad grave o enfermedad genética. En el caso de un "nacimiento indebido", los padres alegan que si se les hubiera dado un diagnóstico prenatal de la enfermedad del niño, podrían haber abortado a su hijo. Ellos buscan una compensación para ocuparse de sus hijos, así como por daños y perjuicios al tener que vivir con un niño discapacitado.
Los casos de "vida indebida" se presentan en nombre del niño, alegando que la no existencia sería preferible a vivir en una condición de enfermedad. En 1998, Amos Shapira argumentó en el Journal of Medical Ethics: "... que sería factible y deseable la compensación para respaldar las acciones de 'vida indebida'. El consejero de genética debió tener un cuidado profesional hacia el recién nacido con discapacidad que ahora reclama, pues sin tal negligencia, él o ella no habría nacido de ninguna manera. La vida defectuosa del demandante (donde una vida sana nunca fue una opción), constituye una lesión indemnizable."
El profesor Shapira de la Universidad de Tel Aviv escribió esto hace una década. Desde entonces, las demandas en nombre de los niños con defectos genéticos se han convertido en algo común en Israel. El 26 de octubre de 2011, la edición del New Scientist magazine informaba que la tendencia creciente de estos casos de "nacimiento indebido", ha llevado a una investigación por parte del gobierno israelí. Israel, al igual que gran parte del Oriente Medio, India y África del Norte tiene una alta tasa de matrimonios consanguíneos, lo que aumenta la incidencia de enfermedades genéticas.
Carmel Shalev, un abogado de derechos humanos y bioética de la Universidad israelí de Haifa, afirma que la cultura israelí está preparada para hacer pruebas prenatales y abortar a los niños con defectos genéticos. Así lo afirma en New Scientist: "Hay todo un sistema sostenido con dinero en pos del bebé perfecto. Todo el mundo participa, los padres, médicos y laboratorios. Los padres quieren bebés sanos, y los médicos les animan a hacerse la prueba, por lo que las pruebas genéticas se comercializan demasiado pronto”.
En otros países, las demandas por un "nacimiento indebido" se centran más en las dificultades de los padres que en los niños. Un caso de 2009 en Inglaterra solicitó 1,5 millones de libras esterlinas como pago a cuenta del cuidado de Rupert, un niño de cinco años, quien nació con defectos congénitos de corazón, con paladar hendido, anomalías vertebrales y un solo riñón. Rupert usa también una silla de ruedas, requiere ventilación mecánica a través de una traqueotomía y tiene un tubo de alimentación. Los abogados de la familia argumentaron que debido a que estas anomalías no se habían detectado en la ecografía prenatal, a su madre nunca se le ofreció la oportunidad de abortar a Rupert. Ella estuvo agobiada por su cuidado y en consecuencia, era merecedora de la compensación.
En 2003, se obtuvo una compensación por un síndrome de Down no diagnosticado prenatalmente. Una madre de Vancouver se quejó de que tener un hijo con una discapacidad mental había "alterado totalmente nuestros planes". Se le otorgaron diez mil dólares en compensación por su sufrimiento…
En un caso por igual inquietante, una pareja de lesbianas australianas intentó demandar a una clínica de fertilización in vitro porque la madre biológica quedó embarazada de gemelos, cuando ella sólo quería un hijo. La demanda alegó que la pareja estaba "abrumada" con dos hijos. La madre biológica estaba fuera de sí porque tuvo que comprar un cochecito para gemelos muy caro y porque había sufrido náuseas durante el embarazo... A pesar de que esta demanda fue rechazada por los tribunales australianos, la reflexión a la que llevó tal demanda es parte del --cada vez más frecuente--, punto de vista de los padres.
En todo el mundo, los niños son deshumanizados y tratados como accesorios en la vida de los adultos. Con la anticoncepción, los niños son concebidos cuando son convenientes para sus padres. El aborto es permitido para destruir a un niño "defectuoso", a fin de que sus padres no tengan que lidiar con enfermedades y discapacidades. De hecho, un titular de un diario danés, anunció a principios de este año un avance médico que cura el síndrome de Down. En realidad, el anuncio informaba de que las exhaustivas pruebas prenatales y el aborto posterior de los niños no nacidos con síndrome de Down, eliminarían los nacimientos de esos niños.
El advenimiento de técnicas de reproducción asistida ha permitido seleccionar aún con más precisión la venida de un niño. Los embriones son revisados antes de su implantación. Aquellos que no son del sexo deseado o los que no son óptimos genéticamente, se descartan. En 2009, los médicos británicos anunciaron con entusiasmo el nacimiento de la primera bebé que había sido examinada desde que era un embrión, con el fin de asegurar de que no fuera portadora del gen BRCA1 del cáncer de mama. Al hacerlo, implícitamente reprueban la vida de todas las mujeres que portan el gen BRCA1. Para estos médicos, habría sido mejor que estas mujeres nunca hubiesen nacido.
Cuando tener un bebé se convierte en una suerte de consumismo, no es de extrañar que los padres deseen algún tipo de garantía de devolución de su dinero. Cuando un producto adquirido no cumple las especificaciones con que se encargó, lo enviamos de regreso y pedimos un reembolso. Las demandas por "nacimiento indebido" se convierten en una compensación por una compra "defectuosa".
Con las demandas por una “vida indebida", se alega que los niños discapacitados son errores de fabricación. Para empezar, ellos jamás debieron haber nacido. Esa forma de pensar despoja a los niños de su dignidad humana y degrada a sus padres. La cultura secular juzga a los menores por la utilidad que tienen para sus padres. El amor condicionado genera desconfianza e inseguridad.
Este punto de vista socialmente destructivo debe ser contrarrestado con una cultura de la vida, que acepte la vocación natural hacia la paternidad. Los padres son llamados por Dios para ser custodios de una vida humana específica que Él les da. Todos los niños, sin importar el estado de su salud, son concebidos a imagen de Dios. Cada niño viene con su propia serie de desafíos y no se puede negar que algunos de estos desafíos son enormes. Sin embargo, si Dios nos llama a una tarea, Él no nos abandonará. Nos dará su gracia, si tenemos la fe suficiente para confiar.
*Denise Hunnell, MD, es miembro de HLI Latina, una iniciativa educativa de Vida Humana Internacional. Escribe para el Foro de la Verdad y de la Caridad de HLI en Estados Unidos.
Traducido del inglés por José Antonio Varela
http://www.zenit.org/article-41238?l=spanish
Por Denise Hunnell, MD*
Imagínese mirando a su niño y declarando con frialdad: "Tú nunca debiste haber nacido". Los padres están haciendo exactamente eso en los tribunales de todo el mundo, ya que presentan demandas por una "vida indebida" o un "nacimiento indebido", en contra de médicos y clínicas de fertilidad.
Estos penosos casos son una variación de las clásicas demandas de "homicidio culposo" por negligencia médica. El hecho es que los demandantes no están satisfechos porque el paciente --en este caso un niño--, vivió en vez de morir. Por lo general, estos niños sufren de una discapacidad grave o enfermedad genética. En el caso de un "nacimiento indebido", los padres alegan que si se les hubiera dado un diagnóstico prenatal de la enfermedad del niño, podrían haber abortado a su hijo. Ellos buscan una compensación para ocuparse de sus hijos, así como por daños y perjuicios al tener que vivir con un niño discapacitado.
Los casos de "vida indebida" se presentan en nombre del niño, alegando que la no existencia sería preferible a vivir en una condición de enfermedad. En 1998, Amos Shapira argumentó en el Journal of Medical Ethics: "... que sería factible y deseable la compensación para respaldar las acciones de 'vida indebida'. El consejero de genética debió tener un cuidado profesional hacia el recién nacido con discapacidad que ahora reclama, pues sin tal negligencia, él o ella no habría nacido de ninguna manera. La vida defectuosa del demandante (donde una vida sana nunca fue una opción), constituye una lesión indemnizable."
El profesor Shapira de la Universidad de Tel Aviv escribió esto hace una década. Desde entonces, las demandas en nombre de los niños con defectos genéticos se han convertido en algo común en Israel. El 26 de octubre de 2011, la edición del New Scientist magazine informaba que la tendencia creciente de estos casos de "nacimiento indebido", ha llevado a una investigación por parte del gobierno israelí. Israel, al igual que gran parte del Oriente Medio, India y África del Norte tiene una alta tasa de matrimonios consanguíneos, lo que aumenta la incidencia de enfermedades genéticas.
Carmel Shalev, un abogado de derechos humanos y bioética de la Universidad israelí de Haifa, afirma que la cultura israelí está preparada para hacer pruebas prenatales y abortar a los niños con defectos genéticos. Así lo afirma en New Scientist: "Hay todo un sistema sostenido con dinero en pos del bebé perfecto. Todo el mundo participa, los padres, médicos y laboratorios. Los padres quieren bebés sanos, y los médicos les animan a hacerse la prueba, por lo que las pruebas genéticas se comercializan demasiado pronto”.
En otros países, las demandas por un "nacimiento indebido" se centran más en las dificultades de los padres que en los niños. Un caso de 2009 en Inglaterra solicitó 1,5 millones de libras esterlinas como pago a cuenta del cuidado de Rupert, un niño de cinco años, quien nació con defectos congénitos de corazón, con paladar hendido, anomalías vertebrales y un solo riñón. Rupert usa también una silla de ruedas, requiere ventilación mecánica a través de una traqueotomía y tiene un tubo de alimentación. Los abogados de la familia argumentaron que debido a que estas anomalías no se habían detectado en la ecografía prenatal, a su madre nunca se le ofreció la oportunidad de abortar a Rupert. Ella estuvo agobiada por su cuidado y en consecuencia, era merecedora de la compensación.
En 2003, se obtuvo una compensación por un síndrome de Down no diagnosticado prenatalmente. Una madre de Vancouver se quejó de que tener un hijo con una discapacidad mental había "alterado totalmente nuestros planes". Se le otorgaron diez mil dólares en compensación por su sufrimiento…
En un caso por igual inquietante, una pareja de lesbianas australianas intentó demandar a una clínica de fertilización in vitro porque la madre biológica quedó embarazada de gemelos, cuando ella sólo quería un hijo. La demanda alegó que la pareja estaba "abrumada" con dos hijos. La madre biológica estaba fuera de sí porque tuvo que comprar un cochecito para gemelos muy caro y porque había sufrido náuseas durante el embarazo... A pesar de que esta demanda fue rechazada por los tribunales australianos, la reflexión a la que llevó tal demanda es parte del --cada vez más frecuente--, punto de vista de los padres.
En todo el mundo, los niños son deshumanizados y tratados como accesorios en la vida de los adultos. Con la anticoncepción, los niños son concebidos cuando son convenientes para sus padres. El aborto es permitido para destruir a un niño "defectuoso", a fin de que sus padres no tengan que lidiar con enfermedades y discapacidades. De hecho, un titular de un diario danés, anunció a principios de este año un avance médico que cura el síndrome de Down. En realidad, el anuncio informaba de que las exhaustivas pruebas prenatales y el aborto posterior de los niños no nacidos con síndrome de Down, eliminarían los nacimientos de esos niños.
El advenimiento de técnicas de reproducción asistida ha permitido seleccionar aún con más precisión la venida de un niño. Los embriones son revisados antes de su implantación. Aquellos que no son del sexo deseado o los que no son óptimos genéticamente, se descartan. En 2009, los médicos británicos anunciaron con entusiasmo el nacimiento de la primera bebé que había sido examinada desde que era un embrión, con el fin de asegurar de que no fuera portadora del gen BRCA1 del cáncer de mama. Al hacerlo, implícitamente reprueban la vida de todas las mujeres que portan el gen BRCA1. Para estos médicos, habría sido mejor que estas mujeres nunca hubiesen nacido.
Cuando tener un bebé se convierte en una suerte de consumismo, no es de extrañar que los padres deseen algún tipo de garantía de devolución de su dinero. Cuando un producto adquirido no cumple las especificaciones con que se encargó, lo enviamos de regreso y pedimos un reembolso. Las demandas por "nacimiento indebido" se convierten en una compensación por una compra "defectuosa".
Con las demandas por una “vida indebida", se alega que los niños discapacitados son errores de fabricación. Para empezar, ellos jamás debieron haber nacido. Esa forma de pensar despoja a los niños de su dignidad humana y degrada a sus padres. La cultura secular juzga a los menores por la utilidad que tienen para sus padres. El amor condicionado genera desconfianza e inseguridad.
Este punto de vista socialmente destructivo debe ser contrarrestado con una cultura de la vida, que acepte la vocación natural hacia la paternidad. Los padres son llamados por Dios para ser custodios de una vida humana específica que Él les da. Todos los niños, sin importar el estado de su salud, son concebidos a imagen de Dios. Cada niño viene con su propia serie de desafíos y no se puede negar que algunos de estos desafíos son enormes. Sin embargo, si Dios nos llama a una tarea, Él no nos abandonará. Nos dará su gracia, si tenemos la fe suficiente para confiar.
*Denise Hunnell, MD, es miembro de HLI Latina, una iniciativa educativa de Vida Humana Internacional. Escribe para el Foro de la Verdad y de la Caridad de HLI en Estados Unidos.
Traducido del inglés por José Antonio Varela
http://www.zenit.org/article-41238?l=spanish
Suscribirse a:
Entradas (Atom)